El primer día en un colegio nuevo nunca es fácil, sobre todo si lo tienes a él como compañero de habitación.

Carolus es un niño mimado que siempre ha obtenido lo que quería con solo pedirlo, mientras que Efrén es un chaval que sabe lo que es tener que ganarse las cosas y que no se asusta ante los retos. Por eso cuando ambos coinciden como compañeros de cuarto, están destinados a chocar desde el principio.