PDV DE Narrador
Taemin estaba acostado aburrido esperando a que llegara su dueño del trabajo. Aunque trataba de no mostrarlo odiaba cuando su dueño se iba por grandes periodos de tiempo dejándolo totalmente solo en casa. No es que se sentía solo y necesitaba a los demás. Pero le aburría estar solo no había nada que hacer. Usualmente iría a la casa de Jongin o si no a la casa de Omma Kibum. Pero hoy no tenía ganas de hacer absolutamente nada.
Movía su cola de un lado a otra mientras miraba televisión acostado, la verdad ni le estaba prestando atención al dorama que estaban dando. Estaba demasiado aburrido para su gusto además tenía hambre.
“Ojala Minho traiga algo para comer que muero de hambre.” Pensé mientras abrió la refrigeradora solo para hallar leche y unas latas de refresco.
“Nota mental ir con Omma al súper” pensó el gato mientras tomaba uno de los refrescos y lo abría
Volvió a caminar hacia la sala sentándose en el sofá. Miraba al reloj de su celular para revisar la hora. El gato suspiro, era tarde usualmente su dueño estaría en casa a esta hora, estarían comiendo alguna cosa rica que haya comprado el mayor, después mientras Minho miraba las repeticiones de los partidos que perdió el dia se acostaría en sus piernas disfrutando de la compañía del otro.
Además hoy era un dia muy especial para los dos, era el aniversario, del dia en que Minho lo haya adoptado. Por eso mismo razón no había salido con sus amigos para poder arreglarse para la ocasión. Vestía un conjunto muy a la moda, hasta se cambió el peinado, solo para que Minho le diría que lindo se veía hoy.
“¿Por qué tardara tanto?”
Antes vivía con Jinki, un buen hombre que lo encontró en la calle cuando era pequeño y lo llevo a vivir con él. Además allí conoció a su Omma Kibum y su appa Jonghyun.
Poco tiempo después Jinki le dijo que uno de sus amigos lo adoptaría, la verdad estaba asustado al principio, que tal si el chico era malo. Todas sus preocupaciones se esfumaron cuando conoció a Minho, lo primero que lo sorprendió de él era que era tan guapo como los príncipes de los cuentos que le contaba su Omma. Y también en su personalidad parecía un príncipe tan amable y caballeroso. Debería haber sido obvio que se enamoraría del mayor.
Y agradecía que el mayor también le correspondía, la primera vez que se confesaron parecía sacado de una mancha y el menor siempre lo acordaba ya que jamás pensó que el varonil Minho fuera tan tierno. Tratando de dedicarle una canción para su cumpleaños.
La verdad Minho no poesía un grandioso voz, no sería famoso, pero para Taemin tenía la voz más hermosa del mundo. Y más cuando le dedico esa canción tan dulce que aún no podía creer que lo haya escrito. Parecía sacado de uno de sus sueños.
El aún recuerda las caras de envidia que tenían Jongin y Sehun al enterarse que Minho y él era novios oficiales ya pasando la barrera de ser solo mascota y dueño.
Celosos que ellos aún seguían el mascotazone, pero a Taemin no le importaba lo único que le importaba era que Minho lo quería. Aunque el hecho de saber que había conseguido lo que tanto quería antes de sus amigos le daba un gran sentimiento de felicidad.
Después de unos minutos más el gato se inquietaba, ya había pasado una hora esperando de más, usualmente ya estaría aquí a las 9 de la noche, pero ya eran más de las 10. Taemin estaba empezando a preocuparse por el mayor.
“¿Le habrá pasado algo? “Pensó el menor mientras tomo su celular para llamar al mayor.
Pero no le contestaba, lo llamo un par de veces más pero solo escuchaba el deja su mensaje.
“¿Por qué no me contesta?” pensó el menor. “¿y si tuvo un accidente? ¿O qué tal si me está engañando? ¿Nunca ha tardado tanto para contestarme?”
El gato suspiro mientras se acostaba en el sofá triste. Al pasar el tiempo sin poner atención al televisor se quedó dormido.
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Lentamente Taemin se iba despertando, para sentir que alguien acariciaba su cabello. Al instante el menor levanto la vista y vio a su dueño sonriéndole.
El gato solo lo quedo viendo un momento y tomo su celular para ver qué hora era, eran las 12 de la noche.
-¿hace cuánto llegaste?-pregunto Taemin sentándose.
-Hace unos 15 minutos, ¿me estabas esperando?- respondió el mayor.
-¿Por qué no contestaste mis llamadas?-pregunto el menor ignorando completamente las preguntas del mayor.
-¿Me llamaste? No recibí ninguna llamada.-
-te llame como cien veces, ¿Por qué tardaste tanto?-
-Hmm porque si.-
El gato hizo una mueca de confusión, el mayor nunca le había tratado de esta manera.
-¿olvidaste que dia es hoy?-pregunto el menor mirando al mayor con una cara triste.
-¿Qué es hoy?-dijo el mayor como si nada.
El menor lo vio con una cara de enojo y tristeza. Estaba tan molesto, se había arreglado esperando algo y aparentemente su supuesto novio se había olvidado del dia en que conocieron.
-¡Eres un idiota! ¡Te odio!- grito el menor mientras le tiraba las almohadas del sofá.-Me voy, te odio.-
El menor se paró molesto y caminaba con furia hacia su habitación. Minho se rio un poco y lo tomo del brazo para luego abrazarlo.
-Mi gatito lindo, ¿en verdad me creíste?-dijo el mayor con una voz divertida. –bebe solo estaba jugando. Jamás olvidaría el dia en que conocí al hermoso amor de mi vida.
El gato se quedó callado.
-solo quería jugar un poco contigo, eres muy fácil de engañar Minnie. Lo siento por hacerte esperar, tuve que terminar un montón de papeleo. Pero como lo termine podre pasar todo el dia contigo mañana. Además te compre algo.-
El menor lo miraba sorprendido.
-¿Qué me compraste?-pregunto el menor.
-Hmm es una sorpresa.-
El menor hacia un puchero. El mayor sonrio y tomo la mejillas del menor besándolo suavemente.
Y saca de su bolsillo una caja.
-Ábrelo.- dijo el mayor dándole la caja pequeña al menor.
El gato abrió la cajita para encontrar un brazalete de plata que tenía el signo de infinito engravado.
El menor lo miro sorprendido recordando que lo había visto en una tienda hace meses cuando salieron de compras. Era uno brazaletes de pareja que le gustó mucho al menor. Ese dia el mayor no se lo quería comprar ya que se verían muy cursis, eso fue lo que dijo el mayor.
-¿te gusta?-pregunto el mayor sonriéndole dulcemente al menor.
-Pero dijiste que era muy cursi.-
-Lo dije para engañarte, para poder sorprenderte.-
El menor lo miraba fijamente para abrazarlo.
-¿te gusta jugar conmigo? Siempre te gusta jugar conmigo, lo odio, pero te amo demasiado.-
-Aw que lindo mi bebe, eres bien cursi.-
El acto le sonrio y hace un puchero.
-Es tu culpa que soy cursi.-
-Aja si claro, por cierto te ves muy lindo hoy. Te cambiaste el peinado, ¿cierto? Te luce aunque tú te ves en bien como sea.- dijo el mayor mientras le ponía el brazalete en la muñeca del gato.
Taemin lo miraba feliz y sin aviso beso al mayor de una manera muy apasionada. Poniendo sus brazos alrededor del cuello del mayor. Al principio Minho se sorprendió pero rápidamente empezó a corresponderle poniendo sus brazos la cintura de su lindo gatito.
Se separaron hasta el momento en que sentían que les hacía falta. Se quedaron viendo directamente a los ojos los dos. El menor le sonrio una sonrisa traviesa.
-Hmm ahora debo darte mi regalo.-dijo el menor mientras tomaba el mano del mayor llevándolo a su habitación.
Lo sentó en la cama, poniéndose encima del mayor besándolo y quitando su ropa. El mayor sonreía y le correspondía al menor, mientras le quitaba su ropa también.
Cuando el menor estaba sin camisa se alejó para quitar su pantalón quedando solo en su ropa interior.
-Supondré que tú eres mi regalo. Gracias por el hermoso regalo.-dijo el mayor sonriéndole al mayor con esa gran sonrisa de idiota que el menor amaba.
-De nada.-contesto el menor riéndose.
El menor se acercó acostando al mayor, para luego desabrochar su pantalón y quitárselo junto con su ropa interior.
Minho miraba al menor excitado, le gustaba ver a su lindo gatito tomar el control.
-Cariño antes de que empieces te tengo otro regalo, y creo que te gustara mucho.-dijo el mayor parándose, caminado hacia el closet sacando una caja.
-¿es algo pervertido cierto?-pregunto el gato mirando fijamente al mayor. Si era cierto que Minho era dulce y todo un caballero, pero eso no le quitaba lo pervertido.
-Hmm depende de qué forma lo ves. Pero te va gustar, te lo prometo.- dijo el mayor dándole la caja.
El gato miro a su dueño una vez más para abrir la caja, y había un bote de lubricante de sabor y olor de fresa y una especie de vibrador.
-¿En serio?- pregunto el menor viendo serio el mayor.
-Te va a gustar te lo prometo.-dijo Minho mientras acostaba al menor y le quitaba la ropa interior. El menor lo miraba esperando y mirando con cuidado lo que hacía el mayor.
Minho separo las piernas del menor acariciándolo. Tomo el lubricante y sacando un gran cantidad poniéndolo en sus dedos. Con cuidado mete un dedo con cuidado en la entrada del menor. Rápidamente ya tenía tres horas dentro del menor sacaba pequeños gemidos.
El mayor saco los dedos haciendo que el menor se quejara un poco. Después lubrico el vibrador y lo metió dentro del menor poniéndolo en velocidad media.
El menor gemía alto con una cara llena de placer. El mayor sonrio y empezó a jugar con los pezones del menor, mientras lamia uno de ellos y jugaba con la otra con sus dedos.
Esto solo hacía que el gasto gimiera más alto sus orejas moviendo.
-Parece que si te gusto tu regalo.- dijo el mayor mientras tomaba la erección del menor y empezar a masturbarlo rápidamente.
-Minho por favor ya hazme tuyo. Ya me voy a venir.-
-Hmm veinte.-dijo el mayor mientras le aumento la velocidad a sus movimientos y besaba al menor.
Se vino el menor gimiendo lo más alto posible, tenía la cara roja. El mayor sonrio y lo dio otro beso.
El menor se sacó el vibrador y acostó al mayor para meter el miembro del mayor dentro de él gimiendo hasta meter todo. Rápidamente se acomodó ya que estaba estirado.
Taemin empezó a moverse rápidamente gimiendo, el mayor lo miraba totalmente excitado acariciando su piel. Al pasar el tiempo el mayor cambio la posición poniéndose encima del menor, embistiendo al menor con embestidas rápidas y fuertes logrando pegar el lugar del menor haciendo que gimiera a gritos.
Sin aviso el menor se vino sin aviso otra vez manchando su abdomen, el mayor siguió embistiéndole hasta venirse dentro del menor. Se separó para acostarse a su lado abrazándolo.
-Te amo Minnie.-dijo pero noto que el menor no le respondió. Y vio que el menor ya se había dormido. Minho sonrio abrazándolo y besando su frente dulcemente.